Introduccion a ser un Matrimonio Cornudo

Introducción al mundo de los cuernos


Los cuernos son una realidad:

Según he podido observar en el Internet, a pesar de ser un tabú en casi todas las sociedades (sino en todas) este tema de los cuernos es una fantasía presente en la mente de muchas parejas a nivel mundial, tanto de ellos como de ellas; algunas veces son fantasías silenciosas y otras veces ésta es manifestada a la pareja con consecuencias felices para unos e infelices para otros.

Según mi experiencia y los casos a los que he podido tener acceso a través de la lectura, los cuernos consentidos no es una fantasía que todos puedan llevar a la práctica. Sólo las parejas que hayan alcanzado un alto nivel de madurez y solidez podrían atreverse a plantear esta aventura a su pareja y dar algunos pequeños pasitos y evaluar qué tan cómodos y seguros se sienten con lo cuernos. 

La diferencia entre cuckold  y swinger:

Si bien es cierto estas 2 formas implican una forma de pensar más liberal respecto de la sexualidad que el común de las personas, ambas actividades implican sexo extraconyugal y ambas formas de pensar han roto los tabúes impuestos por la sociedad; sin embargo, son diferentes en cuanto al rol y permisos con que cuenta cada uno de los miembros de la pareja, en particular el hombre de la casa.

Los swingers están constituidos por parejas en las que ambos cuentan con libertad de disfrutar de su sexualidad con otras personas. Tanto él como ella pueden tener encuentros sexuales con otras personas juntos en la misma habitación o, en ocasiones, cada uno por su lado pero siempre con el conocimiento y consentimiento de la pareja.

En el mundo de los cuckold o cornudos, ella, la esposa, es la que goza de esta libertad. Ella puede, y de hecho lo hace, tiene sexo con otros hombres delante de su esposo o por su cuenta pero con el conocimiento y consentimiento de él. Por su parte él no goza de esta libertad, él debe guardar fidelidad a su amada esposa siendo feliz y gozando cuando su esposa es feliz y goza.

Seguridad vs dudas:


La pareja cuckold debe estar completamente segura de lo que desea hacer. Ella debe amar a su esposo y saber que haga lo que haga o con quien lo haga, siempre va a regresar a su hogar (aunque sea con la vagina irritada y llena de semen). Él debe estar seguro del amor de ella y que sus encuentros sexuales con otros son solo eso: sexo. 

En alguno de los blogs amigos decían, y estoy totalmente de acuerdo, que el 99.99% no es suficiente, aquí se está 100.00% seguro o mejor es no intentarlo.

Si hay alguna duda, por pequeña ésta que sea, hay que parar, conversar bien al interior de la pareja (aquí los terceros salen sobrando), evaluarlo y decidir si continúan o abandonan el intento dejándolo en la pura fantasía. 

Una linda relación de pareja no se debe perjudicar por un simple "calentón" de una fantasía. 


Según mi experiencia, es importante, muy importante, que la pareja vaya realizando una evaluación de su situación como pareja, que debe ser muy fuerte y estable,  y a partir de ahí vaya avanzando.


Sus fantasías: 

Lo primero que deben considerar es su nivel de comunicación: ¿Qué tan fácilmente pueden expresarse el uno con el otro? ¿Qué tan bien pueden entender su lenguaje verbal y no verbal? ¿Qué tan tolerantes son con la forma de pensar del otro? ¿Qué tanta afinidad tienen en sus actividades? (no solo en lo sexual), etc.

Y es que si su comunicación está en un buen nivel, esto llevaría implícitamente a un alto conocimiento de su pareja, de su forma de pensar, sus gustos y aficiones, su jerarquía de valores, sus prioridades, sus sueños y también sus fantasías.
 

Pienso que el conocimiento de la pareja debe ser realmente pleno para adentrarse en este mundo pues deben tener en cuenta que cuando estén realizando sus exploraciones y estén presentes otras personas en la misma habitación (pues de eso se trata este tema) ambos deben poder "leerse" mutuamente y saber si están cómodos o si algo no les ha gustado y esto muchas veces no lo van a poder decir en voz alta... Imagínense que están en una cita, en una cena para conocer al candidato, y de repente ella siente un aroma que le resulta desagradable. Ella no va a poder decir "él apesta", pero su pareja debe poder darse cuenta de inmediato que este candidato no va a ser el elegido y que entre ambos deben ir dándole las señales para rechazarlo de la manera más amable posible porque tampoco se trata de hacer sentir mal a la gente.
 
 

¿Estamos realmente seguros de esto?

Aunque suene repetitivo debo insistir en esto, mi intención con esta serie de artículos no es calentar a nadie para que se tire de cabeza a la piscina sin saber si tiene agua. 

Muy bien, creemos que nos conocemos lo suficiente y nuestra relación y amor es muy fuerte y estable y, entonces nos hacemos las preguntas: ¿Cómo le digo a mi pareja que tengo una fantasía cuckold? ¿Cómo lo tomará? ¿Afectará mi relación de pareja?... Entonces, volvemos al punto anterior, si no sabes cómo decírselo o cómo lo va a tomar entonces no la conoces lo suficiente como para ingresar a este mundo, hay que regresar al punto anterior y seguir trabajando la comunicación, el conocimiento mutuo, la confianza y la estabilidad emocional de la pareja en su conjunto. 

Luego, una vez se ha superado la barrera de la comunicación y del conocimiento, creo que sigue el establecimiento de las prioridades. Si bien es cierto los corneadores deben recibir su ración de goce y los cornudos gozamos mucho prestando a nuestras esposas, lo principal y más importante es el disfrute de ella. Ella va a disfrutar de su sexualidad con la complicidad de su esposo. Esto debe estar muy claro, es una decisión de ambos, aquí nadie puede ni debe imponerle cosas a nadie.



En los próximos artículos seguiré comentando la forma en la que creo se debe adentrar correctamente a conseguir unos cuernos bien puestos sin poner en riesgo la estabilidad de la pareja. Espero colaboren con comentarios que seguramente servirán para enriquecer su contenido y encaminar futuros artículos.

8 comentarios:

  1. Buen artículo, se nota que sabes de lo que hablas. Un saludo

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  2. Lo que a mí me pasa es que me da un morbazo tremendo imaginar a mi mujer con otro a pesar de que, en teoría, no debiera hacerme ninguna gracia. Creo que la explicación a esta paradoja estriba en que los humanos necesitamos del refrendo de los otros (aunque sea en parte) para estar seguros de nosotros mismos. Me explico: Aunque yo esté casado con una mujer que a mí me parece preciosa y deseable, si yo no advirtiera en nadie más que yo esa percepción acerca de ella, acabaría por dudar de la certeza de su atractivo. Es decir, además de mis ojos, mi olfato, gusto, tacto y oído, necesito notar las miradas lascivas del resto de hombres y mujeres hacia ella, también las malas vibraciones de celos y envidia por tener algo que ellos quisieran y yo poseo. Todo eso, unido al no desdeñable factor de voyeurismo que supone ver a alguien tan cercano a ti como tu esposa con su húmedo coño ocupado por una polla extraña mientras jadea de placer... Si nos gusta ver a otros en las pelis porno, el subidón que puedes pegar si la chica es tu mujer, puede ser tremendo.También quiero resaltar que a ellas también les excita vernos con otra, cosa que por aquí veo que nunca se dice. Recuerdo que estando en la playa hace años,mi mujer y yo con una amiga suya, una joven de 18 años, en un momento dado se terció ponerle crema en la espalda a la muchacha y yo asumí el mando mientras le guiñaba el ojo a mi esposa. Comencé por arriba y fui bajando de forma muy sensual mientras acompañaba el masaje con voz calentorra. Al llegar a la zona alta de los muslos y el culo, al tiempo que extendía la crema, introducía todo lo que podía los dedos hacia la parte interna de los muslos en dirección al ano y coño por lo que la chica empezó a temblar ligeramente acabando por levantarse apurada aunque sonriente, diciendo que tenía que marcharse. Siempre me quedó la duda de si lo hizo por respeto a mi mujer o porque había dejado el calzón del bikini chorreando. Pero lo bueno fue que cuando se hubo ido, mi esposa me confesó que estaba totalmente empapada por la visión de mí, acariciando las nalgas y muslos de su amiga y la forma en que ésta reaccionaba. Salimos pitando de la playa y al llegar a casa, echamos cuatro polvos en algo más de media hora en los que ella se corrió 12 veces y yo cuatro. Fue fantástico. Aunque no tanto como una noche en que... (sigue en el próximo).

    NUMBER SIX

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  3. ...en la que volvimos al hogar después de haber cenado en casa de una pareja muy atractiva, así, de nuestro estilo y que intentaron que la cena se prolongara hacia algo más caliente. No llegó a suceder porque (creo) ambos de mutuo acuerdo, decidimos huír de allí. Pero la visión del tipo acercándose a la cara de mi esposa susurrando y llevando la mano hacia su cintura y culo mientras su santa casi me metía la lengua por la oreja, hizo que al llegar a casa yo estuviera más caliente que el pico de una plancha. Y a mi mujer le pasaba lo mismo porque cuando le toqué el chocho, los chorros le bajaban por la entrepierna. Esa noche me quedó grabada para siempre; me corrí siete veces y ella debió pasar de los veinte orgasmos, era como si hubiéramos tomado una droga para el sexo, incansables, mi polla nunca había estado más dura, jamás había expulsado tal cantidad de leche, ella nunca había estado tan húmeda (y eso que lubrica siempre como una licuadora) encendida de deseo y emputecimiento con las mejillas y el bollo ardiendo, voz entrecortada y mirada vidriosa. ¡¡¡FANTÁSTICO!!!
    Todo lo anterior es para que quede claro que entiendo el morbazo de estas situaciones. Lo que ya no veo tan claro es por qué demonios el marido que consiente que su esposa joda con otros, tiene que convertirse en un muñeco masoquista que no pueda hacer nada sin el permiso de su santa y del maromo de turno. Puede que a mí me ponga saber que mi mujer se lo haga con otro, incluso puede que me guste verlo y me excite hasta el punto de correrme, pero de ahí a tener que tragar el semen del fulano, ni hablar. Saldrían ella y él por la ventana si se atrevieran a ordenármelo. Ah, y además, a mí también me gustaría follarme a otras tías, sólo faltaría. Luego, mi nena y yo nos lo contaríamos todo y los polvos entre nosotros serían gloriosos. ¡Si es así, me apunto pero de la otra manera, ni soñarlo!

    NUMBER SIX

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  4. nosotros ya lo hicimos con mi marido, y les puedo garantizar que tuve miedo al principio, cuando me lo propuso, luego me siguio hablando de los beneficios y es realmente hermoso y eso que tengo 63 anios y busco chicos jovenes que me hacen delirar frente a mi amado cornudo y el se vuelve loco como yo de placer es una nueva vida entre nosotros que no conociamos y gracias a uds que nos aconsejan me anime y no estoy para nada arrpentida ahora buscamos corneadores juntos con mi marido y super felices en esta nueva y maravillosa experiencia prueben esposas queridas como yo lo hice y veran que el sexo con otro no es mejor ni peor solo distinto....

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  5. A mi esposa ya se la han tirado varios hombres, tuvimos la suerte de poder iniciarnos en este mundo de la mejor manera, sucedió una noche que un primo tuvo un problema con su auto cerca de casa y vino a pedir auxilio, como era fin de semana nos quedamos platicando, tomando unos tragos y luego jugando a las cartas, empezamos con las apuestas primero castigos pequeños y luego pagar con prendas, mi esposa fue la primera en quedar desnuda, en un momento me retiré a propósito a los servicios higiénicos para dejarlos solos y cuando regrese encontré a mi primo comiéndole las enormes tetas a mi esposa, ellos como que se sorprendieron entonces me acerqué por detrás de mi esposa y la abracé, ella me empezó a sobar la verga sobre el pantalón, cuando se giró para sacarme la verga mi primo aprovecho para penetrarla, nos tiramos a mi esposa el resto de la noche y desde esa vez mi esposa se convirtió en la mujer de mi primo y durante dos años se la tiraba por lo menos dos veces a la semana. Ahora mi esposa se excita cada vez que algún amigo nos visita, le gustan mucho los tríos con dos hombres, se ha emputecido en tal medida que en un viaje que tuvo por trabajo, salió sola a una discoteca y conoció dos tipos uno de ellos africano que se la follaron esa noche sin piedad y le reventaron el culo a vergazos. A veces creo que he perdido el control pues se ha convertido en toda una puta de gran calaña que cada macho que se le cruza ella se lo quiere tirar.

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  6. Escribeme al was: 0989645099
    Me gustaria conocer mas de tu mujer

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  7. Algún cornudo interesado para cojerse a mí esposa. Marlenneycarlos@gmail.com
    Somos de México, León Guanajuato.

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